lunes, 14 de agosto de 2017

Llantos generosos.


He leído que los campesinos de los campos de soja de Corea del Norte dicen que si conoces un hombre que llora generosamente es porque tiene un corazón generoso.

Yo me emociono con facilidad, y soy lo que aquí calificamos como una persona “de lágrima fácil”.

Pero dudo tener un corazón generoso.

Deberé esforzarme y trabajar mi corazón para que los campesinos nord-coreanos no vean afectado su refrán.

No hay comentarios:

Publicar un comentario